Jonathan Franzen, Encrucijadas
«Es que hay palabras que están ahí fuera en el mundo y empiezas a plantearte qué ocurriría si las dijeras. Las palabras tienen su propio poder, crean el sentimiento, por el mero hecho de que las digas»
#JonathanFranzen #Encrucijadas @salamandraed #EugeniaVázquezNacarino (trad.) #novela
⛪️ Hay libros que sirven para evadirse y libros para la introspección. Creo que leo porque me busco, porque pienso que puedo encontrarme entre las palabras de otros, por eso prefiero los segundos.
Quizá no es cierto que haya libros para evadirse y otros para encontrarse, porque cuando te evades también te encuentras o quizá es imposible encontrarse si una nunca sale de sí misma.
Intento decir que he leído ‘Encrucijada’ sintiendo que no estaba en el lugar adecuado para encontrar lo que buscaba. ¿Qué tiene que ver conmigo la familia de un pastor de una iglesia progresista del Medio Oeste de los años setenta? Ha sido como escapar de mi realidad, como ver una buena película o dar un largo paseo.
Y, claro, he encontrado algo valioso: ¿qué es la vida, ya sea en la Barcelona del 2025 o en el Chicago de los setenta, si no hay Dios, amor, sexo, drogas o crisis mentales? Si Dios es bondad, ¿por qué a menudo pecar es inseparable de sentirse vivo? ¿Es pecado seguir los llamados del corazón? ¿Cómo distinguir los llamados verdaderos, los que obedecen a una ley superior, de los meros caprichos? ¿Podemos dejar de aferrarnos al dolor y tomarlo como una oportunidad para convertirlo en piedad? Y la alegría, ¿quién la merece? Nadie la merece, la alegría es un don. Pero podemos entrenarnos en ella.
Acostumbrada en los últimos tiempos a leer casi solo mujeres o autores en los márgenes, puedo admirar a un grandísimo novelista como Franzen y, a la vez, sentir que no es exactamente esta la literatura que busco y, a la vez, encontrar en sus páginas todo lo que no sabía que buscaba. Si, como a mí, os gusta este estilo, recomiendo también mucho a Jane Smiley, no tanto su conocida ‘Edad del desconsuelo’, sino, sobre todo, ‘Heredarás la tierra’. ⛪️